
Ése es mi objetivo de este año. El primero, digo. Nada que ver con regímenes de los típicos de enero, aunque he de reconocer que me va a venir de perlas. Es un ejercicio de voluntad y constancia. Dice mi buena amiga Cris que necesito un ciclo de 21 días para reforzar las ganas de enfocarme y conseguir mis propósitos. Así es que nada, me despido hasta el próximo día 2 de todo lo que contenga chocolate. Todo means todo.
Ays... me veo soñando con Charlie y su fábrica. Lamiendo verdes prados de azúcar y bañándome en lagos de cacao. Espero no despertarme con un Oompa Loompa durmiendo a mi lado...
1 comentario:
has conseguido, pequeña? a ver si actualizas mas a menudo.....
Publicar un comentario